Los filtros están diseñados con seis niveles de purificación, cada uno con materiales específicos que aseguran un agua más limpia y segura. El primer nivel utiliza piedra caliza, seguido de una capa de grava de piedra caliza en el segundo. El tercer nivel está compuesto de granito, mientras que el cuarto contiene arena de río para atrapar partículas más finas. En el quinto nivel, el carbón mineral ayuda a eliminar contaminantes, y finalmente, el carbón activado en el sexto nivel garantiza la absorción de impurezas y malos olores, brindando agua pura.
Purificar el agua en la zona rural de Vélez, Santander, es esencial debido a la contaminación de fuentes hídricas por el uso de agroquímicos, actividades agrícolas y ganaderas, y la falta de infraestructura adecuada para el tratamiento del agua. El consumo de agua sin tratar puede provocar enfermedades gastrointestinales, afectando la salud de las familias campesinas. Además, garantizar el acceso a agua limpia mejora la calidad de vida, reduce riesgos de salud pública y promueve un desarrollo sostenible en la región.
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